Ingredientes (para unas 10 porciones)

• 10 huevitos de codorniz

• ½ marraqueta o pan baguette cortado en rodajas

• 10 láminas de queso (puede ser mantecoso o gouda)

• 5 láminas de jamón crudo o serrano, cortadas por la mitad

• 2 cucharadas de aceite de oliva

• Pimienta a gusto

• Perejil picado (opcional)

• Toque Halloween: 1 cucharada de puré de zapallo o unas gotas de colorante naranjo (puedes usar betarraga si quieres tonos rojos “de terror”)

• Aceitunas negras para decorar “ojos monstruosos”

Preparación

1. Corta el pan en rodajas y tuéstalas un poco en horno o sartén hasta que estén crujientes.

2. Coloca sobre cada rodaja una lámina de queso y media de jamón.

3. Cocina los huevitos de codorniz en agua hirviendo durante unos 4 minutos. Sácalos y pásalos por agua fría para pelarlos más fácil.

4. Pela los huevitos y córtalos por la mitad. Saca las yemas y mézclalas con el puré de zapallo o con unas gotitas de colorante para lograr un tono anaranjado. Agrega un poco de pimienta.

5. Rellena las mitades con esa mezcla. Si tienes manga pastelera o una bolsita con un pequeño corte en la punta, quedará más bonito.

6. Decora cada huevo con una rodajita de aceituna negra para simular un ojo.

7. Pon los huevitos rellenos sobre las rodajas con jamón y queso, rocía con un poco de aceite de oliva y perejil.

8. ¡Listo! Sirve como picoteo o aperitivo para la noche de Halloween.