Preparación

1. Añadimos el agua y el vinagre al vaso, colocamos el cestillo con los huevos de codorniz dentro, tapamos y programamos 13 minutos, velocidad 2, temperatura varoma. Según la temperatura que tenga el agua cuando la pongáis (fría, del tiempo o caliente) tardará más o menos en llegar a la temperatura varoma. Así que como indicación os digo que los huevos de codorniz, como son pequeñitos, se cuecen en 4 minutos a temperatura Varoma. Por eso, los 13 minutos que os digo son orientativos, así que controlad que una vez que se ha iluminado la luz de varoma contad que estén 4 o 5 minutos.
2. Sacamos inmediatamente el cestillo (con ayuda de la espátula y con cuidado de no quemarnos con el vapor que sale del vaso) y ponemos los huevos en un recipiente con agua fría.
3. Pelarlos es muy sencillo: igual que los huevos normales, los cascamos un poco y les vamos quitando la cáscara empezando por la base, la parte más ancha del huevo. Los pasamos por agua una vez pelados para quitarle cualquier resto de cáscara, dejamos escurrir y reservamos.
4. Lavamos las hojas de albahaca y las escurrimos muy bien. Las ponemos en el vaso junto con los quesos, los piñones y el diente de ajo. Programamos 20 segundos, velocidad 7. Con la espátula, bajamos los restos de la tapa y del interior del vaso hacia las cuchillas.
5. Añadimos el aceite de oliva y la sal y emulsionamos programando 20 segundos, velocidad 7. Reservamos.
6. Partimos los huevos longitudinalmente por la mitad y los colocamos en una bandeja. Echamos la salsa pesto por encima.